COLECCION DE ESCRITOS MISCELANEOS TOMO 1 CAPÍTULO 69

Tomo I 11- JESÚS DESAMPARADO DE DIOS Salmo 22 Todo esto, ¿no es acaso la gracia para con nosotros, quienes nada merecíamos, “la verdadera gracia de Dios, en la cual estamos”? ¡Que podamos apreciar los consejos y los caminos del “Dios de toda gracia, que nos llamó a su gloria eterna en Jesucristo! ¡A él sea la gloria y el imperio por los siglos de los siglos!” (1 Pedro 5:10-12). ¡Que nuestras alabanzas abunden! ¡Pero que sean las alabanzas de Cristo en medio de nosotros, de Aquel que se digna a estar allí en medio de dos o tres congregados en su nombre! (Mateo 18:20). Él está con nosotros cuando somos llevados por alguna circunstancia a defender la verdad o la santidad de Dios: ¿Podría estar ausente acaso cuando nos reunimos para adorar a su Dios y a nuestro Dios, a su Padre y a nuestro Padre? “Así que, ofrezcamos siempre a Dios, por medio de él, sacrificio de alabanza, es decir, fruto de labios que confiesan su nombre” (Hebreos 13:15). Los versículos siguientes del salmo 22 contienen un llamamiento fundado en la resurrección del Mesías sufriente: “Los que teméis a Jehová, alabadle; glorificadle, descendencia toda de Jacob, y temedle vosotros, descendencia toda de Israel. Porque no menospreció ni abominó la aflicción del afligido, ni de él escondió su rostro; sino que cuando clamó a él, le oyó” (v. 23-24). Podemos notar, de paso, que el Señor anticipó estas palabras cuando pronunció al morir: “Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu” (Lucas 23:46). Cuando Dios lo resucitó de entre los muertos hallamos la respuesta pública a su clamor. Así, encontramos al Mesías, ya no sufriendo, sino siendo librado (“oído”), anunciado el nombre de su Dios y Padre a sus hermanos, y alabando él mismo en medio de la congregación. Y luego hay un llamamiento dirigido a todos aquellos que temen a Dios, para que lo alaben sobre la base de la expiación. Porque por la cruz de Cristo, toda la cuestión del pecado y de los pecados, delante de Dios y para el creyente, está resuelta para siempre. Continuará...

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